Soy dualidad…
Me siento a veces impotente pero en otras estoy eufórica.
Nerviosa y pesimista con una
cantidad de energía positiva que
explosiona a raudales.
Capaz de sostener y elevar
pero también sonrisa que llora a veces. Soy unos ojos que lloran, soy ojos que
se ríen.
Adolescente que se puede emocionar por un panchito, pero mujer que va
de dura a la que no le tiembla la mano y es muy capaz de atizar con látigo si
tiene que defender lo suyo.
A veces niñata con pataleta
infantil y vieja que conoce el hastío por las sensaciones y el reflejo de lo que ya
ha vivido.
Gata mimosa que ronronea,
negra pantera hambrienta y acechante. Valiente en la vida y tímida. En una invisibilidad consciente… visible e
invisible a diario.
Pero soy guerrera dispuesta
para la batalla. Puntal y columna para
soporte de duros o sutiles envites.
Muy observadora.
Siento tanto la ausencia en la
piel como la alegría y el disfrute en la
caricia. Percibo en mi que lo que tengo, mi esencia es grande aunque mi
presencia sea muy pequeña.
Capaz de sangrar si me duele…
de sentir ya sea lo bueno… o ya sea lo malo… pero también indolente y fría a
veces aunque por dentro me esté
abrasando.
Soy una página de libro en
blanco que trata de pintarse a diario,
de componerse y de escribir… con calma pero a su propio paso. Que quiere seguir creciendo,
aprendiendo e investigando.
Sin prisa, pero sin pausa... avanzando... siempre avanzando
Palabra que calma sutil y
abrazo que consuela. Dulce cuando y con quien me sale pero sin empalagar. No
soy de de llantos lastimeros.
Susurro calladamente, grito en
silencio. No hablo mucho, lo sé… casi siempre callo a veces con mucho ruido…
Siempre te diré la verdad … menos
cuando mienta para salvarte.
Siempre seré de las que bailan
con los pies, con las manos, con los brazos… con el cuerpo… pero sobre todo con
el alma. Siempre, siempre bailando.
Ahora en calma, parada, observando y esperando.
Estoy en ardiente deseo y viviéndolo, a veces de la manera más apacible, respirando, oliendo, creciendo, probando ... y en otras imaginando.
Átame en corto pero déjame mi espacio.
Agárrame! Porque necesito
sentirme atada a ti pero suelta. Respiro
en ti y me mata sentir el ahogo de la ausencia.
Presente estando ausente y
ausente si no tengo “la presencia”.
Adoro la noche aunque viva el día con su sol que me ilumina en la
misma medida que la luna.
Así soy, en parte, así de rara.
Así de dual.
amapola